Слугата кој и фрлил мерак на жената на Султанот
Живяла някога в едно царство страшно надарена царица- с големи месести наляти напращяли и щръкнали цици.
У короля Англии Ричарда "Львиное Сердце" была жена-красавица
O bobo da corte tinha um desejo enorme de beijar os seios fartos da rainha
Ahmet sarayın hizmetkarlarından biri.. Yıllardır Kraliçeyi görür ve onun göğüslerine hayran olurmuş.. Artık bir saplantı halini almış Kraliçenin göğüslerine dokunmak.. Tüm cesaretini toplayıp...
Amit era um alto funcionário da corte do Rei Akbar. Há muito tempo
Nick era un cavaler al regelui Artur si avea o obsesie deosebita pentru frumosii sani ai reginei
Lancelot y su deseo Lancelot era un alto funcionario de la corte del Rey Arturo. Hacía ya algún tiempo
Michael le Maître Dragon était un officiel à la cour du roi Arthur. Il était obsédé par un fantasme
The Dragon Master Michael the Dragon Master was an official in King Arthur's court. He had a long-standing obsession to nuzzle the beautiful Queen Guinevere's voluptuous breasts. But he knew the...
Amit era un alto funcionario de la corte del Rey Akbar.
Hacía mucho tiempo estaba obsesionado соn el deseo incontrolable de gozar de los voluptuosos pechos de la reina hasta hartarse.
Por supuesto, nunca había podido hacerlo.
Un día reveló su deseo a Birbal, principal consejero y Contador de la Corona, y le pidió que hiciese algo para ayudarlo.
Birbal, después de mucho pensar, acordó, соn la condición de que Amit le pagara mil monedas de oro. Amit aceptó el acuerdo.
Al día siguiente Birbal preparó un líquido que causaba picazón y lo derramó en el sutien de la reina mientras ésta tomaba un baño;
Pronto el escozor comenzó y fue aumentando en intensidad, dejando al rey preocupado y a la reina muy molesta.
Se hicieron consultas a los médicos, y ante la falta de respuesta de éstos Birbal dijo que a su entender sólo una saliva especial, aplicada por cuatro horas, curaría el mal. Birbal también dijo que esa saliva tan especial podría ser encontrada en la boca de Amit.
El Rey Akbar se puso muy feliz y llamó a Amit, quien durante las cuatro horas siguientes se cansó de gozar a voluntad los suculentos y deliciosos pechos de la reina, haciendo todo lo que siempre había deseado.
Con su deseo ya plenamente realizado y su libido satisfecha, Amit se negó a pagarle a Birbal lo que habían convenido; además se burló de él y se le rió en la cara.
Sabía que, naturalmente, Birbal nunca podría contar el hecho al rey. Pero Amit había subestimado al Contador de la Corona, hombre de muchos recursos como todos los de su profesión.
Al día siguiente Birbal colocó el mismo líquido en los calzoncillos del rey.
Moraleja: Nunca dejes de pagarle a tu Contador