Chistes sobre ginecólogos
Una señora de 80 años dio a luz un precioso bebé, ginecólogos, pediatras y por supuesto la prensa, estaban muy interesados en indagar más acerca de este milagro; vinieron a la casa de la anciana solicitando ver al bebé, la anciana les dice que esperen que luego les atenderá. Al paso de una hоrа, los interesados regresan соn la misma solicitud, esta vez la anciana les pide que tengan paciencia y les dice que el bebé tiene que llorar. Esperan, luego regresan y la anciana les dice que no es posible ver al bebé porque aún no ha llorado, entonces un periodista le pregunta:
¿ Hay alguna razón por la que el bebé tiene que llorar antes que le podamos ver?
Sí, y muy buena, contesta la anciana.
¡ Se me olvidó dónde le dejé dormido!
Hacer feliz a una mujer es fácil...
Sólo se necesita ser...
1) Amigo
2) Compañero
3) Amante
4) Hermano
5) Padre
6) Maestro
7) Educador
8) Cocinero
9) Mecánico
10) Plomero
11) Decorador de interiores
12) Estilista
13) Electricista
14) Sexólogo
15) Ginecólogo
16) Psicólogo
17) Psiquiatra
18) Terapeuta
19) Audaz
20) Simpático
21) Atlético
22) Cariñoso
23) Atento
24) Caballeroso
25) Inteligente
26) Imaginativo
27) Creativo
28) Dulce
29) Fuerte
30) Comprensivo
31) Tolerante
32) Prudente
33) Ambicioso
34) Capaz
35) Valiente
36) Decidido
37) Confiable
38) Respetuoso
39) Apasionado
40) No ser celoso, pero tampoco desinteresado.
41) Llevarse bien соn su familia, pero no dedicarles más tiempo que a ella.
42) Darle su espacio, pero mostrarse preocupado por dónde estuvo.
43) No olvidar las fechas de cumpleaños, aniversario de novios, de boda, graduación, santo, menstruación, fecha del primer beso, cumpleaños de la tía y del hermano o hermana más querida, cumpleaños de los abuelos, de la mejor amiga.
Un abogado se casó соn una mujer que ya se había casado 11 veces. La primera noche, en el cuarto del hotel, la novia le dijo:
"Por favor, querido, trátame соn cuidado. Todavía soy virgen."
Perplejo, ya que ella había sido casada 11 veces, le pidió explicaciones a la novia.
Ella le respondió:
1. Mi primer marido era psiquiatra. El sólo quería conversar sobre sеxо.
2. Mi segundo marido era ginecólogo. El sólo quería examinar el área.
3. Mi tercer marido era coleccionador de sellos. El sólo quería pasarme la lengua.
4. Mi cuarto marido era Gerente de Ventas. El decía que sabia que el producto existía, pero no sabía cómo utilizarlo.
5. Mi quinto marido era del Departamento de Telemarketing. El decía que tenía el producto, pero no sabía cuándo iba a poder entregarlo
6. Mi sexto marido era Ingeniero. El decía que comprendía el procedimiento básico, pero que necesitaba 3 años para hacer las investigaciones, implementar y crear un método revolucionario.
7. Mi séptimo marido era Funcionario Público. El decía que comprendía perfectamente cómo era, pero que no estaba seguro si le competía.
8. Mi octavo marido era Técnico. El decía que si estaba funcionando era mejor ni tocarlo.
9. Mi noveno marido era Gerente de Entrenamiento. El siempre decía:
"Quien quiere enseñar, tiene que aprender primero". Y sólo se la pasaba estudiando.
10. Mi décimo marido era Analista de negocios y se la pasó todo el matrimonio, hablando de forma grandiosa que "Esto va a ser fantástico para ti".
11. Mi décimo primer marido era Gerente de Taller de Reparaciones. El estaba seguro que debía estar funcionando, y vivía prometiéndome mandar a alguien para que me diera una chequeada.
Y añadió:
- Por eso, ahora me casé соn un abogado, porque estoy segurísima que tú sí me vas a jоdеr!
Una señora acude al ginecólogo porque estaba un poco mosqueada por una raya nеgrа que tenía en la entrepierna, justo en la ingle.
El médico la examina, le dice que no parece grave y le receta una pomada, pidiéndole que regrese a los quince días.
Pasado ese tiempo, la mujer vuelve y resulta que la raya no había desaparecido, sino que, aún más, esta se había ensanchado. Entonces, el ginecólogo le receta una pomada más fuerte y le pide regresar en ocho días.
La señora vuelve y la raya era más ancha aún, tanto que ahora el mosqueado era el médico. Tratando de encontrar una solución comienza a interrogarla:
- Dígame, ¿a qué se dedica su marido?.
- Es carpintero.
- ¡Ahí está, jоdеr!. ¡Dígale a su esposo que cuando le coma el соñо se quite el lapiz de la oreja, соjоnеs!.