Erase una vez, un borracho que abordó un autobús en el que viajaba mucha gente, y parándose en el pasillo del autobús, procedió a decir:
- Los de la derecha son unos tarados, los de la izquierda son unos idiotas, los de atrás son unos ****es y los de enfrente son unos estúpidos. Cuando escuchó eso el conductor, frenó sorpresivamente, y toda la gente cayó al piso, incluyendo al borracho, y muy enojado el chofer tomó al borracho por el cuello y le preguntó:
- ¡Ahora sí, dime, ¿Quiénes son unos tarados, unos idiotas, unos ****es y unos estúpidos?
Y el borracho contestó:
- Ya ni sé, ¡Están todos revueltos!