LLega una monjita a la oficina de la M. S. y le muestra una condon. Toda indignada, manda a llamar a todas las otras monjas al patio del convento, a las que les dice:
- Hermanas, mirad lo que se ha encontrado debajo de un olivo en el huerto.
Al tiempo que se oye un OOOOOOH! entre las presentes y un ji, ji, ji (muy bajito en el fondo de la masa congregada)
- Pero eso no es todo - prosigue la M. S.,- este hallazgo demuestra que ha habido un miembro masculino dentro de estos muros!
- OOOOOOH!.... ji, ji, ji.
- Y ademas, que este individuo ha tenido una relacion sеxuаl соn alguna de nosotras!
- OOOOOOH!.... ji, ji, ji.
- Pero hermanas, la buena noticia es... el preservativo estapa picado y la pecadora sera descubierta!
- JI, JI, JI.... -y al fondo, se oye- ooooooh!
Este es un hombre que va en el tren, al que se le sientan al lado dos monjitas, de repente el tren para en una estacion, y dice el hombre:
" Como estamos en la estacion de Cercedilla, tocadme la rodilla"
, a esto que las monjas se enfadan, y le reprochan lo que ha dicho, continua el tren, y al poco se para en otra estacion, a lo que dice el hombre:
"Como estamos en Villalba, tocadme la barba", соn el consiguiente enfado de las monjas, continua el tren y dice una de las monjas, "vamonos rapidamente hermana, que la siguiente es Torrelodones".