Un grupo de hormigas iban de una ciudad a otra соn toda su comida, pasaron 10, 50, 100, hasta 500 años hasta que por fin llegaron, cuando de repente se para la hormiga reina y dice:
Queridas hormigas, se nos ha quedado la sal.
Pero sólo una hormiga podrá ir a traerla de regreso, ¿Quién lo quiere hacer?
Por allá una hormiga levanta la mano y dice:
Yo voy, соn la condición de que no comiencen a comer hasta mi regreso, ¿Están de acuerdo?
Y todo el grupo responde:
¡ Sí!
Bueno, entonces la hormiga se va a su viaje. Pasaron 500, 1.000, 5.000, hasta 10.000 años y llega una hormiga del grupo y dice:
No, a esa hormiga le pasó algo, yo digo que comamos ya.
Pero la hormiga reina le responde:
No, no comeremos, recuerden la promesa, sigamos esperando.
Pasan otros 10.000 años y nada que llegaba la hormiga, hasta que dijo la reina:
Bueno, nos tocó comenzar a comer.
Y todos comenzaron a comer cuando de repente sale una hormiga de un matorral y dice:
¿ Que tal que si hubiera ido?
Un granjero demandó a una empresa de buses por las lesiones que sufrió en un accidente. En el juicio, el abogado de la empresa le pregunta:
¿ Acaso no le dijo usted 'estoy muy bien' al policía que lo auxilió?
Déjeme explicarle lo que pasó, yo llevaba a mi yegua en el platón de la camioneta...
¡ No le pedí detalles, limítese a responder la pregunta! ¿Le dijo usted, sí o no, que estaba muy bien al policía que le ayudó?
Como le venía diciendo, llevaba a mi yegua en el platón de la camioneta y de pronto apareció un bus de su empresa...
¡ Señor juez, estoy tratando de demostrar que esta persona le dijo que estaba muy bien a un policía, inmediatamente después del accidente!, ahora después de varias semanas, él demanda a mi cliente y eso se llama fraude. ¡Por favor, dígale que responda la pregunta!
El juez le explica al abogado que está interesado en escuchar la historia del granjero y le pide a éste que continúe.
Pues yo llevaba a mi yegua en el platón de la camioneta y de pronto, en un cruce, me topé соn un bus que se comió la señal de pare y me estrelló de lado. Yo quedé paralizado por el golpe y la impresión, pero escuchaba que mi yegua gemía como loca, presa del dolor. Unos minutos después, llegó la patrulla de policía y un agente se bajó alarmado por los gemidos de mi yegua. El policía la examinó y finalmente sacó su arma y le pegó un tiro en medio de los ojos. Luego, vino hasta mí y me dijo, "su yegua estaba muy mal y tuve que pegarle un tiro para que no sufriera", ¿Usted cómo se siente?
Entra un hombre borracho a un bar, se sienta en una mesa y empieza a gritar fuerte:
- ¡Camarera, hip, cabbbmmmarera, hip!
- Señor, por favor compórtese, ¿qué desea?
Entonces el hombre saca unos pollitos de los bolsillos, los pone sobre la mesa y dice:
- Tráigame una botella de whisky para mí y para mis sobrinos.
La mujer queda muy asombrada, pero le trae la bebida. Al rato vuelve a llamar el hombre:
- ¡Camarera, una botella de tequila para mí y para mis sobrinos!
Al rato nuevamente:
- ¡Camarera, un champagne para mí y para mis sobrinos!
Entonces la mujer se acerca y le dice:
- Escúcheme, usted ha bebido de más pero no me va a decir que cree que esos pollitos son sus sobrinos.
- Por supuesto que sí, los encontré en la calle y me decían:
“Tío, tío, tío, tío”.
Se encuentran dos burros parlanchines. Un вurrо muy alegre le dice al otro:
¡ Hola! ¿Cómo estás? ¿Sabes?, a mí me va súper bien, me contrató un señor de un circo, tengo buen sueldo, tarjetas de crédito, lo último en autos deportivos, soy la estrella principal del circo.
El otro le contesta muy deprimido:
A mí me va mal, me contrató un juguero y paso vendiendo jugos todo el día соn dos barriles al hombro, los niños se me suben y me golpean.
Pero vos si que eres bruto, le dice el primer вurrо, por qué no hablas y así le demuestras que no eres cualquier вurrо.
¡ Estás lосо!, le dice el otro, qué quieres, que me ponga a gritar jugooossss, jugooooossss.