Un tipo pierde las orejas en un accidente. No hay cirujano plástico que pueda ofrecerle solución alguna. Se entera de que en Suiza hay un cirujano muy bueno y decide viajar a consultarse соn él. El galeno le examina, reflexiona por un rato y, finalmente, dice:
Pues sí, creo que puedo ayudarle. Le operan y, días después de salir del quirófano le quitan los puntos y lo mandan a su hotel.
A la mañana siguiente, enfurecido, llama al cirujano suizo:
¡ Desgraciado! ¡Me ha puesto orejas de mujer!
Pues, hombre, son orejas igual, no hay diferencia entre si son de mujer o de hombre.
¡ Está equivocado!, interrumpe, iracundo, sí hay diferencia.
¡ Ahora lo oigo todo, pero no entiendo nada!
Un hombre va al médico en muy mal estado, соn innumerables golpes en todo el cuerpo, el médico le pregunta la causa:
- Le digo doctor, estaba yo tranquilamente parado, cuando de pronto vino una bicicleta y me da un golpe terrible en la espalda.
-¡ Ah! ya comprendo.
- No, no termina todo ahí, me estoy todavía levantando, y de pronto viene un camión, me pega en una de las piernas y caigo nuevamente. Pero no termina todo, me levanto y el avión en vuelo rasante me da соn toda el ala en el cuello, y cuando estaba por fin recuperándome pasa el trasatlántico y me golpea de lleno соn la quilla en el esternón.
- Usted perdone mi incredulidad, pero lo de la bicicleta lo creo, lo del camión puede ser, pero lo del avión y el trasatlántico, ya me parece un poco exagerado.
-¿ Exagerado? ¡Mire, si no paraban el carrusel a tiempo muero aplastado por la vаса, el caballo y la nave espacial!
- ¡Julio!, que causalidad, después de tanto tiempo, pero hay que ver lo que has cambiado.
Eh, debes haber empezado a hacer ejercicio, porque mira que has adelgazado. Te ves fenomenal, si hasta parece que tienes más pelo, ¿Es postizo? Lo digo porque antes lo tenías rizado.
Y también has cambiado de sastre, obviamente; pero si era imposible verte соn un traje, y ahora llevas una de esas corbatas que odiabas tanto. Y las arrugas, si tienes la piel que parece la de un niño, claro que a lo mejor es porque te has cortado la barba. Pero te queda muy bien, igual que los lentes de contacto, me alegro, porque las gafas aquellas no te favorecían, y además ahora tienes los ojos de color azul, dime picarón, ¿Se liga más así, eh?
- Perdone, pero yo no me llamo Julio.
- ¿Qué? ¿También te has cambiado de nombre?