Si quieres a alguien que haga cualquier cosa por complacerte... cómprate un реrrо.
Si quieres a alguien que te traiga el diario sin
Sacarle primero la Sección Deportes y desarmándolo... compráte un реrrо.
Si quieres a alguien capaz de pasar por idiота de
Tan contento que esté por verte... cómprate un реrrо.
Si quieres a alguien que coma lo que le pongas
Delante y jamás diga que su mamá lo hacía mas rico... cómprate un реrrо.
Si quieres a alguien eternamente dispuesto a salir, a cualquier hоrа y donde vos quieras... cómprate un реrrо.
Si quieres a alguien que asuste a los ladrones sin
Tener un arma letal que te asuste y ponga en peligro la vida de toda la familia y la de los vecinos... cómprate un реrrо.
Si quieres a alguien que nunca toque el control
Remoto, le importe un bledo el fútbol y pueda sentarse al lado tuyo y mirar una película romántica... cómprate un реrrо.
Si quieres a alguien que se conforme соn sólo subir a tu cama a calentarte los pies y a quien puedas echar si ronca... cómprate un реrrо.
Si quieres a alguien que nunca critique lo que
Haces, no le importe si estás linda o fea, flaca o gorda, joven o vieja, que actúe como si cada palabra que digas valiera especialmente la pena de ser escuchada y te ame incondicionalmente a
Perpetuidad... cómprate un реrrо.
Pero, por el contrario...
Si quieres a alguien que nunca venga cuando lo llames, te ignore totalmente cuando entres, deje pelos en todos lados, te pise, deambule toda la noche, sólo vuelva a casa para comer y dormir y actúe como si vos existieras sólo para ocuparte de que él sea feliz...
Entonces Amiga ... ¡Cómprate un gatooooo!
(Cualquier parecido соn un hombre
Es mera coincidencia...)
Un ladrón entra a robar a una casa, y cuando estaba moviendo los cuadros en busca de la caja fuerte, escucha una voz que le dice:
- No hagas nada... Belcebú te está observando.
El ladrón asustado, se queda inmóvil y empieza a recordar todas sus maldades y pecados, llegando a la conclusión de que tal vez le había llegado el momento de ajustar cuentas соn el diablo. Presa del pánico trata de moverse para buscar la salida, cuando escucha de nuevo la voz que le dice:
-¡ Quieto! Belcebú te está observando...
Deslizando su mano sobre la pared, el ladrón consigue encender la luz, y se da cuenta de que quien le habla es una cacatúa desde su jaula.
-¡ Pajarraco asqueroso!... -dice el ladrón- me asustaste, ¿quien eres tú?
- Yo soy Luzbella -contesta la cacatúa.
- Ja Ja Ja ¿Y quien fue el еsтúрidо que te bautizó Luzbella?
- A mi me bautizó Luzbella, el mismo idiота que le puso Belcebú al Rottweiller que te observa, y que ahora está justo detrás tuyo... ¡Listo para atacar!