Un agricultor tiene un peral que sólo le produce 12 peras al año, pero que cada pera pesa alrededor de unos 3 kilos, y por ello está muy orgulloso.
Todos los días va al peral a ver las peras y a sacarles brillo, y mientras tanto todos los días cuenta las peras.
Un buen día se da cuenta que le falta una pera y se enfada, así que se queda todo el día para pillar al ladrón, pero al volver al día siguiente, observa que le faltan ya dos peras, así que моnта guardia junto al peral de día y de noche para pillar al ladrón.
Efectivamente, por la noche se acerca una persona y cuando está encima del peral, le agarra y lo da una vuelta, al tiempo que pregunta:
¿ Quién eres?
A lo que el supuesto ladrón le responde:
¡ Uhmmmm!
Como no le responden, agarra nuevamente al tipo y le pregunta:
¿ Quién eres?
Este de nuevo vuelve a responder:
¡ Uhmmmm!
Enfadado el agricultor porque no le responden agarra al tipo y le da varias vueltas соn mucha violencia y pregunta:
¿ Quién eres?
Pero en esta ocasión соn una tenue voz se escucha:
Soy Juan.
A lo que el agricultor le interpela:
¿ Qué Juan?
Y le responde:
¡ El Mudo!
Es un tipo que baja de su casa para irse al trabajo, y al acercarse a la esquina donde había aparcado la noche anterior su coche, se encuentra соn que se lo han robado.
¡ Maldición! ¡Me han robado el coche! ¡Ladrones, policía, socorro!
En esto que un tipo que pasaba por ahí, se le queda mirando y le dice:
¡ Hombre!, no se ponga usted así, no es para tanto, a fin de cuentas se va a evitar usted gastar una pasta en gasolina, ¿no?
El perjudicado se le queda mirando y le contesta:
Bueno, pues visto así, tiene usted razón.
El otro lo mira, y sacando una рisтоlа le contesta:
Pues hala, démela a mí, junto al reloj, el anillo y el mechero.