Chiste de largos, Cuentos Graciosos
Una mujer se muere. Al llegar al cielo, San Pedro no está y se entretiene mirando por las rejas. Allí ve un gran banquete, соn todos sus familiares y amigos que murieron ya.
¡ Hola, que bien! ¡Hola, estábamos esperándote!
En esto que llega San Pedro y la mujer le pregunta:
Que sitio tan estupendo, ¿Qué tengo que hacer para entrar?
Tienes que deletrear una palabra.
¿ Qué palabra?
Amor.
La mujer la deletrea correctamente, y entra.
Al cabo de los meses, San Pedro le pide que le cubra el puesto por unas horas. Estando ella de guardia, llega su marido.
Hombre, ¿Que tal, cómo te ha ido?
Pues bastante bien. Me casé соn la maciza de la enfermera que te cuidaba mientras estabas enferma, me tocó la lotería y vendí nuestra casita y me compré una mansión, estaba de vacaciones en el Caribe, haciendo ski acuático, y aquí estoy. ¿Qué tengo que hacer para entrar?
Tienes que deletrear una palabra.
¿ Cuál?
Checoslovaquia.
Un hombre va al médico en muy mal estado, соn innumerables golpes en todo el cuerpo, el médico le pregunta la causa:
- Le digo doctor, estaba yo tranquilamente parado, cuando de pronto vino una bicicleta y me da un golpe terrible en la espalda.
-¡ Ah! ya comprendo.
- No, no termina todo ahí, me estoy todavía levantando, y de pronto viene un camión, me pega en una de las piernas y caigo nuevamente. Pero no termina todo, me levanto y el avión en vuelo rasante me da соn toda el ala en el cuello, y cuando estaba por fin recuperándome pasa el trasatlántico y me golpea de lleno соn la quilla en el esternón.
- Usted perdone mi incredulidad, pero lo de la bicicleta lo creo, lo del camión puede ser, pero lo del avión y el trasatlántico, ya me parece un poco exagerado.
-¿ Exagerado? ¡Mire, si no paraban el carrusel a tiempo muero aplastado por la vаса, el caballo y la nave espacial!
- ¡Julio!, que causalidad, después de tanto tiempo, pero hay que ver lo que has cambiado.
Eh, debes haber empezado a hacer ejercicio, porque mira que has adelgazado. Te ves fenomenal, si hasta parece que tienes más pelo, ¿Es postizo? Lo digo porque antes lo tenías rizado.
Y también has cambiado de sastre, obviamente; pero si era imposible verte соn un traje, y ahora llevas una de esas corbatas que odiabas tanto. Y las arrugas, si tienes la piel que parece la de un niño, claro que a lo mejor es porque te has cortado la barba. Pero te queda muy bien, igual que los lentes de contacto, me alegro, porque las gafas aquellas no te favorecían, y además ahora tienes los ojos de color azul, dime picarón, ¿Se liga más así, eh?
- Perdone, pero yo no me llamo Julio.
- ¿Qué? ¿También te has cambiado de nombre?