Dos comadres se encuentran en el mercado y le dice una a la otra: Ay, comadre no sé que hacer соn mi hijo, es muy, pero muy тоnто, yo creo que es el más тоnто de los niños.
A lo que la comadre responde: No, no, no, mi hijo debe ser más тоnто, seguro le gana al suyo.
No, no, no, echa un vistazo a mi hijo... en eso la primera comadre llama a Pablito su hijo y le dice: Mira Pablito, ve a la casa y me buscas a ver si estoy. El niño partió, en el momento la segunda comadre le dice: Ay, eso no es nada mire esto: En eso llama a su hijo Rodriguito, y le dice: Mira Rodriguito, toma $10.00 y ve a comprar una televisión a color, y se va. Luego, en el camino se encuentran los niños y le dice uno al otro. Híjole mano, mi mamá es re-tonta muy pero muy tonta. A lo que el otro responde: No mano, mi mamá seguro que es mucho más tonta que la tuya. No puede ser. Oye esto, me mandó a la casa a ver si estaba y ni siquiera me dio las llaves para entrar. Y el otro le contesta: Pues eso no es nada, la mía me dio $10.00 para comprar una televisión a color, y no me dijo de que color la quería.
Llega Hugo Chávez al Banco Provincial a cambiar un cheque:
- Buenos Días Señorita, ¿me hace el favor de cambiarme este cheque?
- Соn mucho gusto Señor, ¿me permite su identificación?
- Señorita, no traigo identificación pero soy Hugo Chávez Frías, presidente de Venezuela.
- Sí Señor, pero me debe mostrar una identificación, por ejemplo, su cédula de identidad соn fotografía.
- Señorita, no traigo identificación pero pregúntele a quien quiera, soy Hugo Chávez, por favor!
- Lo siento, Señor, pero son reglas del banco. Me debe usted enseñar su identificación.
- Pues no traigo Señorita y me urge cambiar este cheque.
- Mire Señor, lo que podemos hacer es lo siguiente: el otro día vino Andrés Galarraga соn el mismo problema, no traía identificación y para probar que era él, le sacaron un bate, metió varios jonrones y así comprobó que él era en verdad el gran Gato. También vino Antonio Esparragoza y no traía su cedula, entonces se echó unos rounds соn los cajeros y se noqueó a dos y así nos probó que él era en realidad Antonio Esparragoza. Entonces Usted puede hacer lo mismo. Haga algo para probar que usted es Hugo Chávez.
Chávez se queda pensando durante un buen rato y dice...
- Mmm, Caramba señorita, la verdad es que solo se me ocurren puras pendejadas.
- ¡Perfecto Señor Chávez!, ¿en billetes de qué quiere que le cambien el cheque?