Una loca jugaba corriendo en su silla de ruedas a lo largo del pasillo del manicomio imitando el ruido de un automóvil. De repente sale un lосо de una habitación, la detiene y le dice:
- Disculpe señorita, pero está usted sobrepasando el límite de velocidad permitido en esta avenida. ¿Puedo ver su licencia?
La loca busca en su bata y saca un boleto viejo del metro. El lосо verifica el documento, se lo devuelve y la deja seguir..
La loca "prende" su veloz auto y arranca de nuevo imprimiendo velocidad. Al pasar otra vez ante la habitación del lосо, éste surge de nuevo. Vuelve a detenerla y dice:
- Disculpe señorita, pero he visto como
Pasaba la doble línea continua. Le importaría mostrarme su permiso para conducir?
La demente busca otra vez en sus bolsillos y le entrega la envoltura de una chocolatinas. El lосо comprueba que los papeles están en regla, la amonesta de nuevo y deja que se vaya otra vez.
La loca continúa conduciendo a toda velocidad por los pasillos... Y, al volver a pasar por el mismo sitio, sale el lосо por tercera vez de su habitación, pero ahora el loquito está totalmente desnudo y соn el pene en pleno estado de excitación...
La loca lo observa detenidamente y exclama:
- ¡Ay no, no jodas...! ¿Otra vez соn la prueba de alcoholemia?
El Italiano dice:
- Anoche yo le hice masajes a mi mujer en todo el cuerpo соn un aceite de oliva finísimo, luego; hicimos el amor apasionados y la hice gritar durante 5 minutos seguidos, sin parar.
El Francés para no quedarse atrás dice:
- Yo anoche le hice masajes a mi mujer en todo el cuerpo, соn un aceite especial afrodisíaco y luego hicimos el amor, la hice gritar durante 15 minutos seguidos.
El Español dice:
- Eso no es nada, yo anoche le hice masajes a mi mujer соn una mantequilla especial, le acaricié todo el cuerpo соn la mantequilla, luego hicimos el amor y la hice gritar durante 6 horas seguidas.
El Italiano y el Francés asombrados le preguntan:
- Seis horas, oye qué bárbaro, cómo hiciste para que gritara durante seis horas seguidas?
Y el español contesta:
- ¡Me limpié las manos en las cortinas!