Estaba Pepito en la clase de segundo primaria. Viene la maestra y decide que necesitan hacer un examen de seis preguntas.
La maestra divide el curso en dos partes: a un lado los más inteligentes y en el otro lado los más burros, pero para equilibrar la cosa mandó a Pepito para el lado de los inteligentes.
- Primera pregunta, ¿Quién descubrió América?
- ¡CRISTOBAL COLON, Profesora!
- ¡Muy bien!
Salta PEPITO: Una a cero, ¡Le vamos a ganar a estos burros!
- Segunda pregunta, ¿Cuál es el órgano más importante del cuerpo?
- ¡EL CORAZON, Profesora!
- ¡muy bien!
Salta PEPITO: Dos a cero, ¡Le vamos a ganar a estos burros!
La maestra ya se estaba enfadando соn la actitud de PEPITO y le dice:
- Jovencito, se para y se sale!
PEPITO responde:
- El PENE, profesora, y tres a cero ¡le vamos a ganar a estos burros!
- ¡PEPITO, por favor, se sale y no vuelve a entrar!
PEPITO responde:
- LA MIÉRDA, profesora, cuatro a cero. ¡Creo que le vamos a ganar a estos burros!
- ¡Pepito, se sale y no vuelve por un mes!
PEPITO responde:
- La REGLA profesora, cinco a cero y estamos qué le vamos a ganar a estos burros!
Grita la profesora desesperada:
- ¡PEPITO, se va y no vuelve más!
Y grita PEPITO:
- La **** profesora... ¡GANAMOS
Pepito jugaba соn su tren de miniatura en la sala de su casa, mientras su mamá cocinaba y lo miraba de vez en cuando.
Luego de varias vueltas, el tren llega a la estación terminal y Pepito, actuando como el inspector del tren dice:
- ¡Estación terminaaaaal!, ¡Todos los hijos de su chingada madre que viajan hasta aquí tomen todas sus chingaderas y se bajan en chinga del tren; bola de ****os; y los que viajan de vuelta, suban rapidito sus pinches maletas, antes que los agarre a chingadazos!!
Al oír esto, su madre -espantada- salió rápidamente de la cocina y le dice a Pepito:
- ¡Pero qué vocabulario es ese, hijo! ¡Deja inmediatamente tu tren y te me vas a tu recámara ¡Quedas castigado por DOS horas!
Luego de las dos horas de castigo, Pepito vuelve a jugar соn su tren y esta vez dice:
- Estación terminal, los pasajeros deben descender.
A nombre de nuestra empresa les agradecemos haber viajado соn nosotros, prefiriendo nuestra hospitalidad. Por favor bajen sus pertenencias y ante cualquier necesidad, por favor soliciten la ayuda de nuestros asistentes.
Y quienes viajan de vuelta, por favor tengan la bondad de subir al tren соn su equipaje y acomodarse en sus respectivos asientos, que vamos a partir.
Su madre, соn una sonrisa, ya más tranquila, sigue cocinando, cuando inmediatamente después, Pepito agrega:
- Y si algún **** hijo de su chingada madre está emputado por las 2 horas de retraso que tenemos, que se pare y le reclame a la рinсhе vieja que está en la cocina