Un hombre quiere comprar un gallo de pelea, así que se entera de una reunión clandestina y se acerca allí. Paseando por los distintos corrillos, ve a un hombre que parece entender del tema y le pregunta:
- Perdone, ¿cuánto vale el gallo?
- ¿Cuál?, ¿el rojo o el blanco?
- El rojo, el rojo.
- El rojo vale diez mil euros.
- ¿Y el blanco?
- Diez mil también.
- El gallo parece alto, ¿no?
-¿ Cuál? ¿el rojo o el blanco?
- El rojo, el rojo.
- Sí, mide veinte centímetros.
- ¿Y el blanco?
- Veinte centímetros también.
- Y, ¿es bueno peleando el gallo?
-¿ Cuál? ¿el rojo o el blanco?
- El rojo, el rojo.
- Sí, el rojo es muy bueno peleando.
- ¿Y el blanco?
- El blanco también.
- A ver, ¿por qué siempre me pregunta por el rojo o el blanco, si los dos gallos son iguales?
- Porque ¡¡¡el rojo es mío!!!
- ¿Y el blanco?
- El blanco también...