Cuatro jóvenes recién graduados de prestigiosas universidades (MIT, Harvard, Sorbonne y Universidad de Buenos Aires) solicitan empleo en New York, en una gigantesca empresa multinacional. Al cabo de unos días los llaman para hacer entrevista соn el Director General.
Al llegar, el Director les indica que deberán responder a una única pregunta que, dependiendo de su respuesta, el candidato podría ser contratado.
El Director les pregunta:
- ¿Cuál es la cosa más rápida del mundo?.
A lo cual, el graduado del MIT contesta:
- El pensamiento.
Y el Director le pregunta:
- ¿Por qué?
El del MIT contesta:
- Porque un pensamiento ocurre casi instantáneamente.
El Director le indica que le encanta y cree que es una excelente respuesta.
Pasa entonces al graduado de Harvard, que contesta:
- Un parpadeo de ojos.
- ¿Y por qué?.
- Porque es tan rápido, que a veces ni sentimos cuando lo hacemos.
El Director se queda encantado.
Luego viene el graduado de Sorbonne y quien responde:
- Señor Director, la electricidad.
Cuando el Director le pregunta por qué, el de Sorbonne le responde:
- Porque cuando llegamos al interruptor de la luz, соn un ligero movimiento podemos prender una luz a 5 kilómetros de distancia.
- Excelente, responde el Director.
Cuando le toca el turno al argentino de la UBA, éste responde:
- Señor Director, la diarrea...
El Director, anonadado, le pregunta:
- ¿Qué dice? ¿Usted está bromeando?
A lo que el graduado contesta:
- No, señor, eso mismo, la diarrea. Fíjese que anoche tuve una diarrea tan fuerte que, antes de poder pensar, parpadear o encender la luz, ya me había cagado encima.
El Director determinó:
- El empleo es suyo.
En prisión Ud. pasa la mayor parte del tiempo en una celda de 2 x 2,50 m.
En el trabajo Ud. pasa la mayor parte del tiempo en un cubículo de 1,50 x 2 m.
En prisión Ud. tiene tres comidas diarias.
En el trabajo solo tiene una pausa para una y encima debe pagar por ella.
En prisión acortan su condena por buen comportamiento.
En el trabajo recompensan su buen comportamiento соn más trabajo.
En prisión, los guardias abren y cierran todas las puertas por Ud.
En el trabajo debe portar una tarjeta de seguridad y encima abrir y cerrar las puertas Ud. mismo.
En prisión puede ver televisión y jugar algunos juegos.
En el trabajo lo despiden por mirar televisión o jugar.
En prisión le ponen cadenas cuando necesitan llevarlo a algún lado.
En el trabajo le ponen cadenas.
En prisión, dentro de su celda, Ud. tiene su propio inodoro.
En el trabajo debe compartir el baño y suele tener que esperar su turno.
En prisión puede ser visitado por su familia y amigos.
En el trabajo ni siquiera puede telefonear a su familia.
En prisión no paga la luz, ni el agua, ni el gas y no necesita trabajar.
En el trabajo Ud. paga la luz, el agua y el gas соn su sueldo, pero eso después de que le descontaron los impuestos para mantener las cárceles.
En prisión, probablemente tenga un guardia sádico.
En el trabajo, siempre tendrá un jefe.

El Director General de una importante empresa estatal, se encuentra en su despacho sin nada que hacer, cuando entra una de sus lindas secretarias a dejarle alguna correspondencia. Cuando la chica sale, el director se queda observándole el trasero, e inmediatamente le surge una tremenda duda:
"Hacer el amor соn su secretaria, ¿Es trabajo o diversión?"
Esta enorme duda lo mantiene ocupado por 5 minutos, y al no poder resolverla, llama al gerente de proyectos y se la plantea:
- Señor Gerente, si yo hago el amor соn una de mis secretarias, ¿Es trabajo o diversión ?
- No lo sé señor, lo investigaría... -responde el gerente tirando la revista que estaba leyendo.
- Bien, -dice el Director General. -Necesito esa respuesta en media hоrа.
Inmediatamente el Gerente llama a uno de sus asesores, que estaba jugando "marcianitos" en el computador y le tira la bola para que este se lo resuelva.
- Si el Señor Director hace el amor соn una de sus secretarias, se considera ¿Trabajo o diversión?
- No lo sé, señor Gerente...
- Bien, -dice el gerente. Le doy 20 minutos para que lo investigue y me dé una respuesta.
El asesor llama a uno de sus asistentes, quien ese momento hablaba por el móvil соn su novia, y le traslada la misma pregunta, diciéndole que tiene 15 minutos para conseguir la respuesta.
El asistente sale a buscar la respuesta y encuentra a su secretaria pintándose las uñas, le pasa la pregunta y como esta tampoco sabe, le da 10 minutos para que se la responda.
La secretaria se va al sótano donde está el auxiliar general de la dependencia. El hombre esta en mangas de camisa tratando de arreglar la mortecina iluminación del lugar, hay un cerro de papeles en el escritorio, su impresora está generando unos largos listados, su computador procesando algún trabajo importante, los teléfonos suenan para hacerle todo tipo de consultas... Sin importar lo ocupado que se encuentra el pobre hombre, la secretaría del asistente le lanza la pregunta advirtiéndole que se la debe contestar en 5 minutos.
- Si el Director General hace el amor соn una de sus secretarias, ¿Es trabajo o diversión?
-¡ Es Diversión! -contesta el auxiliar inmediatamente sin siquiera voltear a mirar a la secretaria.
- Pero, ¿Como puedes llegar a esa conclusión tan rápidamente? -pregunta la secretaria un poco incrédula.
-¡ Fácil! Porque si fuera trabajo, a esa secretaria ya me la tendrían aquí desnuda sobre mi escritorio...!
Todos los días, muy temprano llegaba a su empresa la hormiga productiva y feliz. Allí pasaba sus días, trabajando y tarareando una antigua canción de amor. Ella era productiva y feliz, pero ¡ay!, no era supervisada.
El abejorro gerente general consideró que ello no era posible, así que se creó el puesto de supervisor, para el cual contrataron a un escarabajo соn mucha experiencia. La primera preocupación del escarabajo supervisor fue organizar la hоrа de llegada y de salida y también preparó hermosos informes.
Pronto fue necesario contar соn una secretaria para que ayudara a preparar los informes, así que contrataron una arañita que organizó los archivos y se encargó del teléfono. Mientras tanto la hormiga productiva feliz trabajaba y trabajaba.
El abejorro gerente estaba encantado соn los informes del escarabajo supervisor, así que pidió cuadros comparativos y gráficos, indicadores de gestión y análisis de tendencias.
Entonces fue necesario contratar una abeja ayudante para el supervisor y fue indispensable un nuevo computador соn impresora a color. Pronto la hormiga productiva y feliz dejó de tararear sus melodías y comenzó a quejarse de todo el papeleo que había que hacer ahora. El abejorro gerente, entonces, consideró que era momento de adoptar medidas.
Así crearon el cargo de Gerente del Área donde trabajaba la hormiga productiva y feliz. El cargo fue para una libélula que alfombró su oficina e hizo adquirir un sillón especial . El nuevo gerente necesitó, claro está, un nuevo computador y, cuando se tiene más de un computador, hay que tener una red local.
El nuevo gerente pronto necesitó un asistente (que había sido su ayudante en la empresa anterior), para que le ayudara a preparar el plan estratégico y el presupuesto para el área donde trabajaba la hormiga productiva y feliz.
La hormiga ya no tarareaba sus viejas melodías y cada vez se le notaba más irascible. "Vamos a tener que contratar un estudio de clima laboral un día de estos" dijo la libélula. Pero un día el gerente general, al revisar las cifras, se dio cuenta que la unidad de negocios (donde trabajaba la hormiga productiva y feliz) ya no era tan rentable como antes.
Así que contrató al búho, prestigioso consultor, para que hiciera un diagnóstico. El búho estuvo tres meses en la empresa y pronto emitió un sesudo informe:
"Hay demasiada gente en este departamento ..." Así el gerente general siguió el consejo del consultor y ... despidió a la hormiga productiva y feliz.
Moraleja: Si eres hormiga productiva y feliz, instala tu propia empresa.
En una conocida empresa de automóviles se envió el siguiente memo dirigido a las secretarias de todos los departamentos:
"Se ruega encarecidamente a todas las secretarias de esta empresa que, para evitar malentendidos y sus posibles consecuencias, que podrían ser nefastas para el encargado de la fotocopiadora (casado y соn un hijo), pues podrían costarle el divorcio, e incluso graves alteraciones físicas, tengan a bien, al escribirle las notas adjuntando documentos, o al hablar соn el solicitándole fotocopias, lo hagan соn propiedad y completando las frases como deben ir, ya que соn frecuencia y debido al mal uso de la lengua española, se han llegado a producir situaciones "embarazosas"
Para el encargado de la fotocopiadora que nos ha hecho llegar sus quejas. A título de ejemplo, se citan algunas notas y frases remitidas por las secretarias:
- Por favor, Pepe, házmelo lo más deprisa posible. Está esperándome también el jefe.
- Pepe, házmelo como la otra vez, anda.
- Hazme cuatro rapidito, pero bien, como tú sabes.
- Pepe, por las dos partes, y fíjate bien, que por detrás tiene que entrar todo.
- Anda Pepe, primero a mí, que lo mío es más urgente.
- Sácamela que se vea lo mejor posible.
- Pepe, despacito pero que salga bien.
Y la más reciente de todas, estando la fotocopiadora ocupada haciendo bastantes fotocopias, una, apurada, va y le dice:
- Ay Pepe, соn la prisa que me corre, ¿no me la puedes meter y me lo haces en un momentito? Anda hombre, por favor, métemela en medio sin que nadie se entere.
Ni decir tiene que se lo hizo y que nadie se enteró, pero por favor, no le pongan en más apuros.
Resulta que hay un vendedor en su primer día de trabajo en una tienda de artículos variados, cuando termina el día, su jefe le pregunta cómo le ha ido соn las ventas, a lo que el noble vendedor responde:
- ¡Pues muy bien... hice una sola venta!
- ¿Cómo? ¿Una sola venta? ¡Pero si el promedio de ventas es de 30 o 40 por día!
- Sí, pero la venta fue de 300.000 dólares!
- ¿$300,000 dólares? ¿Y que vendió?
- Bueno, mire... Resulta que primero le vendí un anzuelo chiquito, un anzuelo más grande y uno de ésos todos coloridos... pero le dije que tan buenos anzuelos merecían una caña buena... así que le vendí dos chicas y una enorme, también le vendí la carnada, y como todo éso no lo iba a llevar en la mano le vendí también una hermosa valija para los artículos de pesca. Como estaba medio nublado le dije que no se descuidara de la lluvia por lo que el hombre decidió comprar también, un par de botas, un capuchón de lluvia y todo un conjunto impermeable, nos pusimos a hablar y tampoco tenía linterna ni radio por lo que también se llevó éso... le pregunté qué dónde pescaba y me dijo que le gustaba la pesca de mar... y le ofrecí el bote соn motor fuera de borda... que también compró... cuando se iba me dijo:
- ¡Pero este bote me va a rayar todo el auto! ¡Entonces le ofrecí una Land Rover 4x4 que le encantó... como iba a estar en el bote y el auto le quedaba en el puerto le instalamos un equipo de seguridad de última generación... y como la pesca era mar adentro también decidió llevarse unas cuantas redes!
El jefe atormentado le dijo:
- ¿Y todo éso se lo vendió porque vino a comprar un par de anzuelos?
- ¿Anzuelos? No, el tipo vino a comprar una cena individual y entonces yo le dije:
- Ya que se te arruinó el fin de semana... ¿Por qué no te vas de pesca?