Una mujer está caminando en la playa y de pronto se encuentra una vieja lámpara. La recoge, la frota y ¡Paff! aparece un genio.
La asombrada mujer le pregunta si le puede dar los clásicos tres deseos.
- No señora, en estos tiempos conceder tres deseos ya es muy difícil... Соn esta inflación que se está viviendo, el creciente desempleo, el salario infame, los políticos y los altos precios del petróleo, lo más que le podría conceder sería un solo deseo y diga que le fue bien, así que ¿qué quiere...?
La mujer decide:
- Quiero que haya paz en el Medio Oriente.
El Genio le pregunta:
- ¿Cómo dice?
Ella contesta:
- ¿Ves este mapa? Pues deseo que estos países se dejen de estar peleando entre sí.
El Genio mira el mapa y dice:
- ¡Válgame, señora!. Estos países han estado en guerra durante milenios. Yo seré muy bueno en mi trabajo, pero ¡caramba! no soy tan bueno como para lograr eso que pide. Mejor pídame otra cosa más fácil.
La mujer piensa un rato y le dice:
- Bueno, la verdad es que nunca he podido conseguir mi hombre ideal. Quiero un hombre que sea considerado y divertido, que le guste cocinar y ayudar en la limpieza del hogar,que sea muy bueno en la cama y que se lleve muy bien соn mi familia. Que no se pase todo el tiempo mirando deportes en la TV y que, además,siempre me sea fiel...
El Genio deja escapar un largo suspiro y le contesta:
- ¡A ver...!, traiga aquí ese p... mapa!

Diario de una mujer que fue a un crucero
Junio 10:
Querido Diario: mi esposo me acaba de informar que pasaremos las vacaciones en un crucero transcontinental. Estoy feliz, ha sido la sorpresa más grande que he recibido en mis 5 años de matrimonio.
Junio 11
Hoy salí de compras y adquirí todo lo necesario para nuestro próximo viaje.
Junio 14
Hoy hable соn mi madre y ella se mostró de acuerdo en cuidarme al niño durante mis vacaciones.
Junio 20
Por fin llegó el día del tan anhelado viaje: Al llegar al puerto casi me desmayo de la emoción, es un barco terriblemente grande; según me informaron tiene capacidad para 1.700 personas. Abordamos, conocimos algunas partes interesantes, cenamos en espectacular restaurante y nos retiramos a descansar muy temprano para hacer los planes del siguiente día.
Junio 21
En la mañana me pasee un rato por la borda. Allí conocí al capitán: es un hombre muy elegante y atractivo. En la tarde estuve en la piscina, y allí vi de nuevo al capitán, quien me sonrió muy amablemente.
Junio 22
Estuve jugando tenis соn el apuesto capitán, y él aprovecho para invitarme a almorzar en su mesa. Yo no podía declinar aquel honor, así que acepté y la pase de maravilla.
Junio 23
Estuve en el casino y me divertí muchísimo; al salir tuve la suerte de encontrarme соn el capitán quien me invitó a cenar a su habitación. Fue una cena de lo mejor, donde no faltó el caviar, ni el champan.
Junio 24
Una vez más cené en la habitación del capitán, y el me propuso que pasara la noche соn él. Yo decliné su tentadora invitación, argumentando mi indefectible fidelidad a marido.
Junio 25
Hoy visité un elegante y moderno piano-bar en el barco. allí me encontré соn el capitán y departimos muchas copas. Aprovechando la "calentura" que producía el licor, el capitán me propuso nuevamente que pasara la noche соn él, decliné su invitación соn el mismo argumento, pero me dijo que si no amanecía соn él, hundiría el barco соn todos los pasajeros y su tripulación... Yo entré en pánico.
Junio 26
Querido Diario: Anoche salve la vida de más de 1.700 personas, ¡Por 3 veces consecutivas...!
Un niño japonesito llega a Estados Unidos y el papá lo inscribe en la escuela.
El primer día de clase, la maestra presenta a Susuki, hijo de un empresario japonés, a los chicos de sexto grado.
Luego la maestra les dice a los alumnos:
- Hoy empecemos repasando un poco de historia de América del norte y del sur... ¿Quién dijo "Denme la libertad o denme la muerte"?
La clase se quedó callada, excepto Susuki:
- Lo dijo Patrick Henry, 1775.
- Muy Bien!
- ¿Quién dijo "el gobierno del pueblo para el pueblo, no debe desaparecer de la faz de la tierra"?
- De nuevo, ninguna respuesta de la clase, salvo Susuki:
- Abraham Lincoln, 1863.
La maestra, asombrada, les dice:
- Chicos, debería darles vergüenza. Susuki que es nuevo en nuestro país, sabe más de nuestra historia que ustedes.
La maestra alcanza a escuchar un susurro:
¡ A la мiеrdа соn los malditos japoneses!
¿ Quién dijo eso?, preguntó la maestra.
Nuevamente Susuki levanta su mano y dice:
- General Mc Arthur, 1942.
La clase queda muda y uno de los chicos alcanza a decir:
- "Voy a vomitar".
La maestra trata de ver quién fue el irrespetuoso:
- "Ya basta... ¿quién dijo eso?
Y Susuki dice:
- George Bush padre, al Primer ministro japonés, 1991.
Uno de los alumnos, furioso, le grita al japonés desde el fondo:
- Chupame ésta!
Susuki, casi saltando en su silla, le dice a la maestra:
- Bill Clinton a Mónica Lewinsky.- 1997 .
El que era el número uno de la clase gritó:
- Estaba primero hasta que llegò este japonés de мiеrdа.
Y Susuki Contesta:
- Mario Vargas Llosa - Elecciones peruanas, 1990.
La clase entra en un estado de histeria. La maestra se desmaya, cunde el caos. Mientras los chicos se arremolinan alrededor de la desvanecida maestra, uno de ellos exclama:
- ¡Мiеrdа, la cagamos, ¿y ahora cómo salimos de este desastre sin que se den cuenta que fuimos nosotros?...
Y Susuki responde:
- Cristina Fernández de Kirchner, Buenos Aires, 2015.

Viajaba en un autobús una comisión especial de Diputados de todos los partidos para analizar los problemas agrarios del país.
En una de las tantas curvas el conductor del autobús pierde el control y caen por un barranco.
Después de algunas horas llegan al lugar de los hechos, ambulancias, Guardia Civil, Ejército, para tratar de dar auxilio a los lesionados, pero se dan cuenta de que no hay ninguna persona entre los restos del autobús.
Por lo tanto empiezan las investigaciones.
La Guardia Civil localiza cerca de donde ocurrió el accidente una casa, y allí se dirigen a pedir informes.
Sale un campesino de la casa a recibirlos, y le preguntan:
- ¡Oiga, Usted! ¿Vio a los políticos que se accidentaron?
- ¡Sí, sí los vi! ¡Y ya les di cristiana sepultura!
- ¿No me diga que todos estaban muertos?
- ¡Bueno... algunos decían que no, pero ya sabe usted como son de mentirosos esa gentuza!