Chistes y anecdotas de Vendedores
Un vendedor se dirige hacia un señor que va a viajar. El vendedor tiene en sus manos dos grandes maletas, pone las maletas en una silla cercana y le dice:
Mire señor, estoy vendiendo este reloj.
El señor le responde:
No gracias, tengo reloj.
Pero este es un magnifico reloj, mire lo que hace, y el vendedor presiona un pequeño botón y sale una pequeña pieza musical.
El señor le responde:
Gracias, pero tengo radio.
Pero eso no es todo, dice el vendedor y le pide su número telefónico, y presiona un pequeño botón y se encuentra llamando a su casa.
El señor convencido le pregunta al vendedor:
¿ Cuánto cuesta?
Eso es lo mejor, solo cuesta 200 pesos, dice el vendedor.
Está bien, responde el señor.
Mire es suyo, que le vaya bien, y se va.
En eso lo llama el señor y le dice:
¡ Dejó sus maletas!
Y el vendedor le responde:
¡ No, esas son las baterías!
Un hombre llama por télefono, le contestan y se produce el siguiente diálogo.
- Buenas noches, Pizzería Internet.
- ¿De donde? ¿Pizzería que?
- Pizzería Internet, señor. ¿Cuál es su órden?
- Pero éste... ¿no era el teléfono de la Pizzería Especial ?
- Era, sí señor, pero la Red compró la pizzería, y ahora el servicio es más completo.
- Bien, ¿quiere tomar mi pedido, por favor?
- Cómo no señor Rodriguez... ¿desea lo de siempre?
- ¿Lo de siempre? ¿Usted como sabe mi nombre?
- Por el sistema identificador de llamadas. De acuerdo соn su número telefónoco, sabemos que las últimas 60 veces que llamó pidió pizza y solicitó Peperoni y queso.
- Uhhh, no me había dado cuenta! pero si quiero lo mismo.
- Señor Rodriguez, ¿puedo hacerle una sugerencia?
- Por supuesto. De que se trata..
- Me gustaría sugerirle la Pizza de ricotta y la de lechuga- rúgula.
- ¿Ricotta? ¿Rúgula? ¡Noooooo! No soporto estas cosas.
- Pero, señor, es lo mejor para su salud. Además, su colesterol no anda bien.
- ¿Queeeeee?
- Tenemos acceso a su hoja clínica y sabemos de sus pruebas de colesterol.
- ¡NO!, ¡yo quiero mi pizza de queso y peperoni! Para eso tomo mi medicamento para el colesterol y consumo lo que quiero...
- Señor, lo siento, pero creo que usted no ha tomado su medicina últimamente.
¿ Cómo lo sabe? ¿Usted me está vigilando todo el tiempo?
- Tenemos una base de datos de las farmacias de la ciudad. La última vez que compró su medicamento para el colesterol fue hace 3 meses, la caja tiene 30 comprimidos, y usted debe consumir uno diario...
- ¡No lo puedo creer! Es cierto. ¿Cómo usted sabe esto?
- Por sus tarjetas de crédito.
- ¿Como? ¿También espían mis tarjetas?
- No señor, solo le hacemos seguimiento a sus compras; Usted siempre compra sus medicamentos соn la misma tarjeta. Según nuestra base de datos de sus gastos соn la tarjeta, desde hace tres meses no ha comprado medicamentos en ninguna farmacia.
- ¿Y no puede ser que haya pagado en efectivo en alguna farmacia? ¿A ver qué me dice?
- De acuerdo a sus ingresos, Usted le paga en efectivo a su empleada doméstica y el resto de sus gastos los realiza соn tarjeta de débito o de crédito.
- ¿Cómo sabe lo que gana mi empleada?
- Usted le paga el salario mínimo...
?¡Esto es el colmo del abuso! ... ¿cómo es posible que usted sepa esto y de manera tan inmediata?
- Señor, lo siento, pero todo está en mi pantalla. Tengo el deber de ayudarlo. Usted debe volver a reprogramar la consulta a la que faltó соn su médico y llevarle los resultados de los exámenes que se hizo el mes pasado para que le ajuste la medicación.
- Mire. Estoy harto de INTERNET, la COMPUTADORA, EL SIGLO XXI, LA FALTA DE PRIVACIDAD , LAS BASES DE DATOS, DE USTEDES y de este país...
- Pero, señor...
- ¡PORQUÉ NO TE CALLAS! Me voy a mudar lejos de aquí. A alguna parte que no tenga Internet, computadoras, teléfono ni gente vigilándome todo el tiempo.
- Entiendo señor Rodriguez...
- ¡PUEDE CANCELAR MI PIZZA, YA NO QUIERO NADA! Creo que voy a usar mi tarjeta de crédito por última vez, para comprar un pasaje de avión e irme al país más lejano que exista...!
- De acuerdo señor Rodriguez. Se cancela. Solo una cosa más, señor...
- ¿Y ahora qué pasa?
- De acuerdo a nuestra base de datos, ¡Su pasaporte está vencido y no podrá viajar a ninguna parte, señor Rodriguez!
Resulta que hay un vendedor en su primer día de trabajo en una tienda de artículos variados, cuando termina el día, su jefe le pregunta cómo le ha ido соn las ventas, a lo que el noble vendedor responde:
- ¡Pues muy bien... hice una sola venta!
- ¿Cómo? ¿Una sola venta? ¡Pero si el promedio de ventas es de 30 o 40 por día!
- Sí, pero la venta fue de 300.000 dólares!
- ¿$300,000 dólares? ¿Y que vendió?
- Bueno, mire... Resulta que primero le vendí un anzuelo chiquito, un anzuelo más grande y uno de ésos todos coloridos... pero le dije que tan buenos anzuelos merecían una caña buena... así que le vendí dos chicas y una enorme, también le vendí la carnada, y como todo éso no lo iba a llevar en la mano le vendí también una hermosa valija para los artículos de pesca. Como estaba medio nublado le dije que no se descuidara de la lluvia por lo que el hombre decidió comprar también, un par de botas, un capuchón de lluvia y todo un conjunto impermeable, nos pusimos a hablar y tampoco tenía linterna ni radio por lo que también se llevó éso... le pregunté qué dónde pescaba y me dijo que le gustaba la pesca de mar... y le ofrecí el bote соn motor fuera de borda... que también compró... cuando se iba me dijo:
- ¡Pero este bote me va a rayar todo el auto! ¡Entonces le ofrecí una Land Rover 4x4 que le encantó... como iba a estar en el bote y el auto le quedaba en el puerto le instalamos un equipo de seguridad de última generación... y como la pesca era mar adentro también decidió llevarse unas cuantas redes!
El jefe atormentado le dijo:
- ¿Y todo éso se lo vendió porque vino a comprar un par de anzuelos?
- ¿Anzuelos? No, el tipo vino a comprar una cena individual y entonces yo le dije:
- Ya que se te arruinó el fin de semana... ¿Por qué no te vas de pesca?